La adaptación cinematográfica hipnótica y cautivadora de la obra literaria "El Hombre Duplicado" (2002) del renombrado autor portugués José Saramago, llevada a cabo por el talentoso director canadiense Denis Villeneuve, demuestra una vez más su destreza tras sus exitosas películas "Incendies" y "Prisioneros". En esta compleja obra, Villeneuve nos sumerge en un universo surrealista con matices buñuelianos, donde se exploran temas profundos como la identidad personal, las obsesiones, el vacío espiritual, la frustración existencial y los límites entre la realidad y el mundo onírico, todo ello enmarcado en un inquietante thriller psicológico.
Adam es un afable profesor de historia que lleva una vida bastante monótona. Un día, viendo una película, descubre a un actor que es idéntico a él. Libre adaptación de la novela"El hombre duplicado", de José Saramago.
La película ofrece una turbia y sugerente reflexión sobre la figura del doble, convirtiendo la pantalla en un escenario tumultuoso, voraz y desasosegante que nos sumerge en una pesadilla cotidiana. Cada plano de la película resulta perturbador y fascinantemente incomprensible en una primera visión, pero a medida que se desarrolla, se convierte en una experiencia asombrosa.
Para disfrutar plenamente de "Enemy", creo que es fundamental abordarla desde la premisa inicial: estás a punto de presenciar un caos que debes desentrañar, abandonando la actitud pasiva típica del espectador. Permite que el director te sumerja en esa atmósfera enfermiza y malsana que rodea al protagonista, lograda mediante tonos ocre y una banda sonora siniestra y minimalista. La deshumanizada, onírica y fría ciudad de Toronto sirve como escenario ideal para el descenso a los infiernos de su atormentado protagonista.
En cuanto al elenco de actores, destaca la impactante interpretación doble de Jake Gyllenhaal, quien da vida tanto al arrogante y bravucón Anthony como al hastiado, tímido y desordenado Adam. Lo más impresionante es la facilidad con la que el actor transmite, a través de su lenguaje corporal, la esencia de cada uno de los personajes sin necesidad de pronunciar una sola palabra. Sin embargo, pequeños detalles marcan las diferencias entre ambos, y Gyllenhaal logra llevar a cabo esta tarea de manera excepcional. Merece un reconocimiento sin reservas por su destacada actuación en esta película. También es digno de elogio el desempeño de las actrices Mélanie Laurent y Sarah Gadon, quienes interpretan respectivamente a la esposa de Adam y a la esposa de Anthony.
"Enemy" se aferra a tu mente y resulta difícil de olvidar si logra captar tu interés. La araña presente en la trama coloniza tus pensamientos, tejiendo su red en la que las diferentes respuestas posibles te asfixian, te gustan y, finalmente, te sumerges en ellas con deleite. Debo admitir que llegar a esta conclusión me ha encantado.
